▪ Baja en calorías: La leche de almendras es generalmente baja en calorías, lo que puede ayudar a controlar el peso, un aspecto crucial durante la menopausia.

▪ Rica en Vitamina E: Este antioxidante ayuda a combatir el daño celular y puede contribuir a una piel más saludable.

▪ Fortificación: Muchas marcas fortifican su leche con calcio y vitamina D, nutrientes esenciales para mantener la salud ósea y prevenir la osteoporosis.

▪ Isoflavonas: La soja contiene isoflavonas, compuestos que imitan el estrógeno en el cuerpo. Estas pueden ayudar a aliviar síntomas como los sofocos y otros malestares asociados con la menopausia.

▪ Alto contenido proteico: La leche de soja tiene un contenido proteico comparable al de la leche de vaca, lo que ayuda a mantener la masa muscular y proporciona saciedad.

▪ Fortificación: Al igual que la leche de almendras, muchas leches de soja están fortificadas con calcio y vitamina D.

▪ Rica en nutrientes: Es una fuente excelente de calcio y vitamina D, ambos esenciales para mantener huesos fuertes y saludables durante la menopausia.

▪ Proteínas: Contiene proteínas completas que son importantes para mantener la masa muscular y apoyar el metabolismo.

▪ Variedades bajas en grasa: Optar por versiones bajas en grasa puede ayudar a controlar el peso sin sacrificar los beneficios nutricionales.